La forma de buscar empleo ha cambiado con los años, hace dos décadas atrás, se disponía de un tiempo prudencial y se llevaban carpetas repletas de papeles donde describían las habilidades de los postulantes. Hoy en día los aspirantes como, por ejemplo, Andrea Milano se inscriben en las principales páginas y millones de profesionales colocan sus perfiles, los cuales son vistos por los empresarios.

Las aspiraciones de personas como ella se ven reflejadas en el esfuerzo que han hecho para alcanzar un alto nivel profesional. Los estudios realizados desde 2008 en la escuela de leyes de Cornell han dado frutos al sembrar en esta joven el sentido de compromiso con su trabajo.

Los empleadores tienen en esta chica un aliado perfecto. En el momento que cursó sus estudios formó parte del equipo de la división de derechos del trabajo y se desempeñó en el departamento jurídico de la ciudad de Nueva York. Este cargo es muy importante en la carrera de cualquier profesional en leyes, puesto que tiene la responsabilidad de ser el rostro de la justicia y la equidad.

La experiencia se obtiene de las oportunidades y una de ellas alcanzó a Andrea al poder enseñar en las clases introductorias sobre derecho laboral y formó parte del equipo de la investigación encausada por profesores reconocidos, acerca de las leyes federales contra la discriminación y la inmigración.

La escuela de relaciones industriales y laborales de Cornell fue el lugar donde Andrea Milano logró desarrollarse en el área del derecho laboral, siendo la historia, la negociación colectiva y el arbitraje su enfoque principal.

Para todo individuo el desarrollo profesional debe estar de acuerdo con los valores morales, así como el sentido de pertenencia hacia aquellos que ayudará en el futuro. Las empresas quieren expertos que estén fundamentados en las normas y aquellos que hagan cumplir cada una de ellas sin dudar.