aumento de senos

El cuerpo humano está diseñado a la perfección, especialmente si nos referimos al punto de vista funcional. Pero nosotros somos seres conscientes, dominamos la tecnología y en estos momentos hemos aprendido a hacerle diferentes cambios, externos e internos. Demos como ejemplo de esto, una cirugía de aumento de senos.

La técnica de colocar implantes en diferentes partes del cuerpo ha resultado exitosa para lograr modificar la fisonomía e influir hasta en la autoestima.

Estos cambios se desarrollan usando materiales que cada vez son más bio-compatibles, es decir, que el sistema inmunológico no los rechaza. Se ha logrado con polímeros en tratamientos dentales, con silicona como la de los implantes mamarios y con titanio principalmente, en el caso de los metales.

Las operaciones quirúrgicas de los senos han producido una revolución total en nuestra sociedad porque ahora las damas pueden mostrar unos pechos que las hacen sentir más identificadas consigo mismas. Es una situación relacionada a la vez con el aspecto, los sentimientos y la autoestima.

Siempre se había podido crear la figura deseada con el vestuario o aditamentos que permitían definir un determinado estilo, pero, internamente, se era consciente de que se trataba de accesorios removibles.

Como un producto de las nuevas investigaciones y tecnologías estas intervenciones tienen sus detractores y defensores, pero por encima de cualquier opinión se continúa trabajando para optimizarlas de tal manera que se incrementen los resultados exitosos, integrando los cambios en la persona.

Los cirujanos plásticos se han comprometido con su profesión, para minimizar las cicatrices y los efectos secundarios, y optimizar simultáneamente la duración de las modificaciones y el impacto visual y corporal.

Hoy, luego de una mamoplastia bien realizada, se puede tornar difícil distinguir la diferencia porque se busca que los senos se vean naturales. Obviamente en esto influye mucho el deseo de la paciente.

Definitivamente esta cirugía ha dado nuevas opciones a las mujeres que no se sentían a gusto con sus mamas, o a las que requieren reconstrucción por otras razones, pero que ahora pueden volver a mirarse en el espejo con confianza. Especialmente, estos implantes les permiten seguir viéndose integrales el 100% del tiempo, lo cual es bueno tanto por ellas mismas como por los demás.