Es obvio que antes de contratar los servicios de una empresa proveedora de web hosting hay que contar con un sitio web, con una página del negocio o empresa que se desee dirigir y sacar adelante. Es por ello es que es importante señalar que un sitio web es considerado como la base de cualquier proyecto en Internet, sea complejo o sencillo. Para diferenciar entre los sitios web se puede hacer una clasificación que los divide en dos, los sitios web estátitos y los sitios web dinámicos.
Cuando se habla de los sitios web estáticos se hace referencia a aquellos que únicamente están formados por páginas con textos, archivos multimedia, imágenes, y demás. Es decir, que los sitios web estáticos son aquellos que ofrecen contenidos fijos, sin brindar interactividad y flexibilidad a sus usuarios (como sucede con las revistas, los folletos, etc.). Su mantenimiento e implementación es muy económica, pero no son interactivos. Su principal interés radica en que los contenidos se vayan renovando de forma habitual.
Por otro lado hacer mención de los sitios web dinámicos, en cuyo caso se incluyen aplicaciones actuando la web como interfaz. El contenido de estos sitios web se almacena en bases de datos, de tal modo que el internauta podrá hacer consultas de tipo personalizado, mostrando los resultados en una página web con enlaces que resultan de gran interés. Algunos ejemplos de este tipo de sitios web dinámicos son las páginas de traducción de palabras o las páginas de correos que permite la búsqueda de códigos postales.
Sea cual sea la página web que se tenga, hacer uso de las soluciones que brindan las empresas proveedoras de servicios de hosting será la opción ideal para alojar todos los archivos del sitio web de forma cómoda, segura, eficaz y siempre de la mano de una empresa de calidad, profesional y con una buena reputación en el mercado.