La mayoría de las empresas prefiere utilizar bolsas de plástico porque tienen numerosos beneficios tanto para los empresarios, como para los consumidores. Por esta razón, si tienes en mente elegir un empaque perfecto para tus productos, debes tener en cuenta las ventajas de este recurso.
En primer lugar, aparecieron para sustituir a las famosas bolsas de papel para cumplir con diversas funciones, con excelentes propiedades de contención, durabilidad e higiene. Además de esto, el coste de fabricación es inferior y, por ende, es un elemento más asequible que otras opciones.
Por otro lado, posee un impacto inferior sobre el medio ambiente en todo el ciclo de vida, es decir, desde la extracción de la materia prima, hasta la transformación y distribución. Generalmente, los empaques elaborados en papel se desechan de inmediato, una vez que se utilizan; mientas que las plásticas se pueden reutilizar sin problemas, manteniendo las características originales.
Asimismo, contribuyen a la protección de los productos alimentarios, puesto que evita los desperdicios que suelen ocurrir en el transporte de estos al mercado o el traslado por parte de los consumidores finales. Esto se traduce en menores pérdidas de dinero y mayor sustentabilidad en la producción.
Sumado a esto, ocupan apenas un 1% de los tiraderos de basura, mientras que las de otros materiales implican un 8%. Con respecto a este punto, hay que destacar que contribuyen a la protección del planeta, puesto que las demás emanan gas metano, un elemento más tóxico que el dióxido de carbono (CO2).
En relación con las bolsas tipo camiseta, que son ideales para el almacenamiento de mercancía, se reúsan en el 90% de los casos para el depósito de residuos. En este sentido, poseen una doble función que beneficia a la sociedad.
Definitivamente, es una alternativa con ventajas increíbles para los usuarios. Haz que formen parte de tu proyecto y recibe estos puntos positivos como ganancia.