La energía renovable deriva de fuentes o recursos naturales. Esto significa que están presentes en el entorno, y además tienen la increíble capacidad de regenerarse.

Por lo tanto, es bien sabido que es inagotable, aunque se deben tomar ciertas precauciones al momento de aprovecharla para no causar estragos en el medioambiente que comprometan el porvenir de las nuevas generaciones.

Algunas de las fuentes más comunes de energía renovable son el viento, el agua, o el sol, aunque existen muchos otros tipos con un potencial energético impresionante.

Principales características de la energía renovable

La energía que proviene de fuentes naturales tiene características muy particulares. A continuación, te presentaremos las más destacadas para que sepas identificarla como todo un profesional.

  1. Todas las fuentes de energía natural son autóctonas.
  2. La energía renovable no se agota con el pasar del tiempo. Esto se debe a que se regenera naturalmente.
  3. La utilización de este tipo de energía no genera residuos medioambientales. Por eso es comúnmente conocida como “energía limpia”.
  4. El impacto ambiental es realmente ínfimo, en comparación con las energías no renovables provenientes del petróleo, el gas o el carbón.

Estas son algunas de las características de la energía renovable más resaltantes, pero lo cierto es que existen muchas otras con un atractivo impresionante.

La energía renovable y la infraestructura

El aprovechamiento de la energía renovable ha captado la atención de las grandes industrias en las últimas décadas, especialmente la de aquellas que se dedican a  los proyectos de infraestructura.

Dentro de ellas figura IENOVA, una compañía mexicana especializada en la promoción de obras de infraestructura energética 100% responsables y eco-amigables.

Esto le ha permitido liderar este mercado en la región latinoamericana desde 1996, y todo apunta a que sus gestiones seguirán alineadas con el máximo cuidado del ambiente y sus recursos en los años siguientes.